Las colchas y los boutís son, con la llegada del buen tiempo, los protagonistas absolutos de nuestro dormitorio.

Cuando las temperaturas empiezan a subir tenemos que pensar cómo vamos a vestir nuestras camas, porque empiezan a sobrar las mantas y edredones. Las colchas y los boutís, son una buena solución.

En efecto, cuando quitamos los edredones de invierno lo primero que notamos es que la cama se queda pobre, sin vestir, sólo con las sábanas y a lo sumo una colcha bajera. Hay que buscar alternativas para el buen tiempo, y la mejor es una colcha o un boutí bonito que vistan la cama y la llenen de color esta primavera y verano, sin dar calor.

Aunque utilicemos fundas nórdicas, cuando quitamos los rellenos y dejamos la funda sola también da la impresión de que falta algo, porque una funda nórdica sin relleno no deja de ser una sábana y la cama se vuelve a quedar pobre. La habitación nos vuelve a pedir algo más para que la dé ese toque de personalidad que tanto nos gusta.

La solución perfecta está en vestir la cama con una prenda ligera, que nos combine con el resto de la decoración del dormitorio y por qué no, que nos dé un cambio en la habitación y nos haga olvidar el duro invierno. Para ello hay dos opciones, la colcha o el boutí, que aun cumpliendo la misma función y siendo prendas muy parecidas, tienen algunas diferencias importantes.

1. La colcha es una prenda fabricada con una sola tela, generalmente de tipo piqué, es decir una tela gruesa, en la que se nota el dibujo con un ligero relieve. Esa tela es lo suficientemente gruesa para que la colcha quede armada y tenga una caída bonita, pero no da apenas calor, que es lo importante pensando en la época del año a la que nos acercamos.
   • La colcha puede ser reversible, pero al ser una sola tela juega con los mismos colores por ambos lados. Lo que cambia es la distribución de esos colores. Es un efecto positivo/negativo para que nos entendamos. Lo que por un lado queda claro, al darlo la vuelta se verá oscuro.
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2. El boutí por el contrario está fabricado con dos telas unidas entre sí mediante un pespunteado y armado entremedias con una capa de guata muy fina. Se confecciona más o menos igual que un edredón, sólo que el relleno es muy ligero. Este relleno arma la prenda para conseguir una caída y un aspecto bonitos. Al estar tejido con dos telas, estas pueden ser completamente diferentes, por lo que estás prendas siempre son reversibles.
   • El boutí abriga un poco más que la colcha. Por ello, dependiendo de la zona climática en la que nos encontremos convendrá más una prenda que otra. Son el cubrecama de entretiempo perfecto. Y si de repente refresca, siempre les podrás complementar con una manta, más o menos fina, puesta debajo.
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A la hora de combinar con nuestras cortinas con el resto de la decoración del dormitorio hay que tener en cuenta un par de aspectos básicos.

Si las cortinas llevan colores marcados, ya sea en el mismo visillo o en las sobrecortinas, o las paredes están pintadas con colores fuertes. Lo mejor es coger colchas y boutis con colores suaves, que son más fáciles de combinar.

Por el contrario, si en la habitación predominan los colores pasteles, las colchas y boutís con colores alegres son mis preferidos. En primavera al alegrar la habitación con estampados de colores vivos y atrevidos conseguiremos un cambio de estilo, más atrevido, más acorde con la alegría de la estación del año.

Tenemos en nuestra colección colchas y boutís para todos los gustos, para todos los dormitorios de la casa. Atrévase a cambiar en primavera, a meter color en su hogar. Este tipo de cubrecamas está pensando para arriesgar con la decoración porque al ser un cambio temporal es más difícil cansarse de los estampados fuertes.  ¡¡Ya sabe, en la variedad está el gusto!!

Espero que este artículo les sea de utilidad. Gracias por su atención.

Un saludo

Javier Castaño